Una muestra en el microcentro permite ver el proceso de su Construcción
El barrio se construye con el trabajo y la cooperación de quienes lo habitan. Un territorio como la Villa 20 está siendo, expresa la temporalidad del gerundio, siempre en presente. “Venite para Lugano, que te haces una casita al lado de la mía”, le escribe a Ricardo su hermano mayor ya residente del barrio a comienzos de los años ‘60.

Esa red de colaboración y trabajo comunitario es importante reconocerla y poder convertirla en datos. El valor de la tierra se expresa mucho más allá del valor que le da el mercado inmobiliario, por eso en estos testimonios recuperamos los relatos que dan cuenta de las acciones que forjan la vida en comunidad a partir de un tejido de ayudas y apoyos mutuos entre las personas: construir colectivamente los servicios básicos para la existencia, el agua, la cloaca, el videocable, los comedores comunitarios, entre otras.
¿De qué está hecha la memoria popular de la Villa 20?
¿Cómo entra en contacto con el centro de la ciudad?
¿Cómo se construye una casa?
Del 2 al 12 de febrero, en un local de Tucumán 538 entre San Martín y Florida, en el microcentro de Buenos Aires, varios monitores muestran una serie de cortos donde la misma gente relata sus recuerdos, y los acompaña con fotografías, dibujos, volantes, afiches y otras piezas gráficas.
Los títulos de los videos da una idea de los temas invocados por la memoria:
- Construcción colectiva
- La organización comunitaria
- Redes de cuidados
- Lugares de encuentro
- Migrar, moverse, construir, habitar
- Celebrarnos
- Perspectiva ambiental / tierra
- Cuando era todo campo
- Las casas ferroviarias
- Don Sánchez el ferroviario
- La quema y el cementerio de autos
- Anécdotas
- El kiosco de Doña Marina, la chancha y la gallina negra
- El álbum de figuritas
- Fiestas populares (del Carnaval a CUJUCA).
- Recuerdos de la infancia.
- El velorio del angelito
- Las mujeres toman la manzana 30: represión y retoma
- La lucha por el cumplimiento de la 1770
- Historias de inmigrantes
- En memoria de Alice Domon y otros desaparecidos
- El cartero
- Milicos y topadoras
La muestra forma parte de una movida más grande organizada por el Instituto Göethe de Buenos Aires. Según informa TELAM: «El centro ha muerto, viva el centro» está integrada por una serie de instalaciones audiovisuales en locales del microcentro porteño que quedaron vacíos luego de la pandemia. Dichas obras remiten a las ciudades y su forma de habitarlas, e invita a reflexionar sobre el espacio colectivo a través de obras de artistas argentinos y del exterior para interpelar a quienes transitan la ciudad sobre el modo de apropiación de las ciudades que se habitan.